viernes, 9 de abril de 2010
La inflación me tiene inflado (V)
Bueno, hemos destruido las diferentes teorías en boga sobre las causas de la inflación, con la facilidad, contundencia, brillantez e irrebatibilidad que se logra cuando uno habla solo.
Ahora pasaremos a tratar el siguiente punto según lo expuesto en nuestra primer entrada, a saber:
c) Comparar cada una con las condiciones actuales de Argentina para juzgar su viabilidad como causal.
En primer lugar el monstruo grande que pisa fuerte: La teoría monetarista, que dice que seguramente este inepto gobierno ha volcado al mercado circulante por encima del crecimiento del producto (ya se sabe, para financiar el deficit producido por la compra de millones y millones de choripanes). Bueno; hemos graficado el crecimiento porcentual del PIB, medido en $ corrientes y junto a él el crecimiento de la Base Monetaria, es decir el circulante en poder del público mas los pesos existentes en cuenta corriente en bancos. Hela aquí
Como podrá verse no surge la mas mínima relación a lo largo de 27 trimestres, que cubren el período de Néstor Kirschner y el de Cristina hasta Diciembre del 2009.Las curvas de crecimiento del PBI y de la circulación monetaria aparecen muy concordantes, armónicas digamos. Pero no quedamos conformes ¡No podíamos creer que prohombres como LLach, Lopez Murphi, Gonzalez Fraga, Avila,todo el CEMA,todo Fiel, toda Mediterránea, tantos, tantos fueran unas máquinas de hablar macanas! Así que procedimos a laborear la información: en primer lugar tomamos el PBI medido en $ constantes de 1993 y sacamos la diferencia entre el porcentaje de variación de la base monetaria y el porcentaje de variación de ese PBI a valores constantes. Volcamos los resultados junto con la inflación en cada trimestre. El resultado, aquí
No hay caso, el monetarismo no explica nada ¡Que pena, tan convincente que parece cuando los dotores se lo explican a Grondona o a Nelson Casto!
Entonces retrocedamos al Keinesianismo, seguro que la utilización de la capacidad instalada llegó al máximo por el aumento de la demanda que se produjo vaya a saber porque putas y eso disparó la inflación.
Así que volqué el porcentaje de utilización de la capacidad instalada, poniendo el promedio general (todas las ramas de la producción), el de Alimentos y Bebidas y los de Refinación de Petróleo e Idustrias Metálicas Básicas. Por supuesto el máximo de utilización posible de la capacidad instalada no es nunca el 100 %. Hay paradas por mantenimiento, pérdidas por deficiencias en el proceso, cambios en la capacidad de tratamiento horaria por causa de variaciones en las características de la materia prima, restricciones de energía eléctrica o de provisión de gas, conflictos gremiales, feriados, etc, etc. Digamos que un 90 % puede tomarse como el máximo y el 85 % un promedio razonable.
Bueno, puede verse que tanto el promedio general como el específico de alimentos y bebidas han estado siempre bastante por debajo de la utilización máxima. Agregué Refinación y Metálicas básicas (fundición y acería, bah) porque son las dos únicas ramas que puede decirse que operaron al mango, pero solo hasta el trimestre 23 ( final de 2008, comienzo de la desaceleración)
Agregué la inflación, multiplicada por 100 para que las líneas se situaran próximas y facilitar la observación del comportamiento.
Y el comportamiento muestra que la utilización de la capacidad instalada nunca fué forzada, menos que menos para el general y el rubro alimentos sobre todo. Y que de cualquier manera no hay ninguna similitud entre el movimiento de la inflación y la utilización de la capacidad ¡Que macana, se nos cayó también Keynes, el muy maricón! ¡Hasta sospecho ahora que de la crisis del 30 no se salió por las ideas de Keynes sino por una oportuna guerra mundial!
Esto no termina aquí; seguiremos tratando este asunto, Cueste lo que cueste (porque seguro que aumenta)
Otro si digo, para los que no lo sepan:Cliqueando sobre los gráficos podrán verlos ampliados(como con inflación, diría)
Ahora pasaremos a tratar el siguiente punto según lo expuesto en nuestra primer entrada, a saber:
c) Comparar cada una con las condiciones actuales de Argentina para juzgar su viabilidad como causal.
En primer lugar el monstruo grande que pisa fuerte: La teoría monetarista, que dice que seguramente este inepto gobierno ha volcado al mercado circulante por encima del crecimiento del producto (ya se sabe, para financiar el deficit producido por la compra de millones y millones de choripanes). Bueno; hemos graficado el crecimiento porcentual del PIB, medido en $ corrientes y junto a él el crecimiento de la Base Monetaria, es decir el circulante en poder del público mas los pesos existentes en cuenta corriente en bancos. Hela aquí
Como podrá verse no surge la mas mínima relación a lo largo de 27 trimestres, que cubren el período de Néstor Kirschner y el de Cristina hasta Diciembre del 2009.Las curvas de crecimiento del PBI y de la circulación monetaria aparecen muy concordantes, armónicas digamos. Pero no quedamos conformes ¡No podíamos creer que prohombres como LLach, Lopez Murphi, Gonzalez Fraga, Avila,todo el CEMA,todo Fiel, toda Mediterránea, tantos, tantos fueran unas máquinas de hablar macanas! Así que procedimos a laborear la información: en primer lugar tomamos el PBI medido en $ constantes de 1993 y sacamos la diferencia entre el porcentaje de variación de la base monetaria y el porcentaje de variación de ese PBI a valores constantes. Volcamos los resultados junto con la inflación en cada trimestre. El resultado, aquí
No hay caso, el monetarismo no explica nada ¡Que pena, tan convincente que parece cuando los dotores se lo explican a Grondona o a Nelson Casto!
Entonces retrocedamos al Keinesianismo, seguro que la utilización de la capacidad instalada llegó al máximo por el aumento de la demanda que se produjo vaya a saber porque putas y eso disparó la inflación.
Así que volqué el porcentaje de utilización de la capacidad instalada, poniendo el promedio general (todas las ramas de la producción), el de Alimentos y Bebidas y los de Refinación de Petróleo e Idustrias Metálicas Básicas. Por supuesto el máximo de utilización posible de la capacidad instalada no es nunca el 100 %. Hay paradas por mantenimiento, pérdidas por deficiencias en el proceso, cambios en la capacidad de tratamiento horaria por causa de variaciones en las características de la materia prima, restricciones de energía eléctrica o de provisión de gas, conflictos gremiales, feriados, etc, etc. Digamos que un 90 % puede tomarse como el máximo y el 85 % un promedio razonable.
Bueno, puede verse que tanto el promedio general como el específico de alimentos y bebidas han estado siempre bastante por debajo de la utilización máxima. Agregué Refinación y Metálicas básicas (fundición y acería, bah) porque son las dos únicas ramas que puede decirse que operaron al mango, pero solo hasta el trimestre 23 ( final de 2008, comienzo de la desaceleración)
Agregué la inflación, multiplicada por 100 para que las líneas se situaran próximas y facilitar la observación del comportamiento.
Y el comportamiento muestra que la utilización de la capacidad instalada nunca fué forzada, menos que menos para el general y el rubro alimentos sobre todo. Y que de cualquier manera no hay ninguna similitud entre el movimiento de la inflación y la utilización de la capacidad ¡Que macana, se nos cayó también Keynes, el muy maricón! ¡Hasta sospecho ahora que de la crisis del 30 no se salió por las ideas de Keynes sino por una oportuna guerra mundial!
Esto no termina aquí; seguiremos tratando este asunto, Cueste lo que cueste (porque seguro que aumenta)
Otro si digo, para los que no lo sepan:Cliqueando sobre los gráficos podrán verlos ampliados(como con inflación, diría)
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2 comentarios:
¿Dónde se podría conseguir una estadística del porcentaje de hijos de puta en ese mismo rango de tiempo? Yo creo que ese dato puede traer algo de luz al tema de la inflación, je. Seguiremos esperando la próxima entrega.
Anónimo, ¡a esa conclusión exactamente pensamos llegar!
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