miércoles, 10 de noviembre de 2010

En carne propia (I)





Historias con motivo del pequeño reacomodamiento del precio de la carne



Como diría Boudou, no es inflación, es simplemente un reacomodamiento ¡Pero pavada de reacomodamiento!.

Antes que nada debo aclarar que mi familia y yo somos vegetarianos, así que solo trato este tema por tres razones:
1) Por ser del interés de las mayorías populares, cuyos hábitos alimenticios requieren el sacrificio de algo así como 2 vaquitas por año por familia (amén de varias decenas de pollos, pescados, un cerdito y varios etc como ser los caballitos que van a la mortadela)
2) Para responder a la estampida de delincuentes de todo pelaje que han salido a hablar pavadas y a intentar cargarle el muerto a Cristina (y sobre todo a Moreno). Desde los de TN, pasando por Biolcatti y terminando por un energúmeno de moda, un tal Schiaritti, de los industriales de la carne.
3) Porque la ganadería bovina es una parte interesante del PBI y los capitalistas de esta rama de la producción social tienen mas peso político que los de otras, en mi opinión no por su peso económico actual sino por haber manejado el país por décadas y representar el mito nacional por excelencia (que ellos mismos inventaron) integrado por el noble paisano, lo duro y sacrificado de la faena, la bonhomía campesina y el carácter fundante de la patria encarnado en la ganadería.Por eso estos hijos de buena madre viven en Barrio Norte, o en countries de Buenos Aires, pero al mostrarse no olvidan la boina, el estandarte falopa de sus legiones.
Bueno, aparte del mito se entremezclaron muy bien con el milicaje, en buena parte proveniente de su clase.
Hechas las aclaraciones, vamos al asunto: Y el asunto es que la nerca aumentó mas del 100 % en menos de un año (ya hablé al respecto aquí), que el lomo está exactamente en lo que pretendía el prócer paisano De Angeli (60 $/Kg según me anoticié en Mirthita a través de 6-7-8) y que resumiendo, nos volvieron a cagar y ya van 200 años.
El argumento para respaldar la estampida es que de golpe y porrazo por efecto del maldito Kirschnerismo nuestros esforzados paisanos que montan AUDIS se vieron forzados, en su léxico campero, a "liquidar vientres" (lo que como sabemos origina la muerte del resto de la vaca).
"Vientres" le llaman ellos a las vacas que pueden generar crías.Como verán son gente práctica; las vacas son vientres, la parte que les dá guita es la única que les interesa. Calculo que a nosotros (aparte de boludos) deben denominarnos "cajeros automáticos" o algo así.
Y al disminuir la población de terneros, novillos y demás seres comibles, por efecto de las sacrosantas leyes del mercado el precio se vá a las nubes.
Porque el mercado tiene eso ¿vió? Siempre patea en contra de los consumidores.
Sorprendentemente se habla de una disminución de 5 millones de cabezas en el último año y un total de 11 millones en los últimos cuatro años (me olvidaba, hablando en general también les dicen cabezas, porque es lo que toman en cuenta al contarlas, ¿Burdo, verdad? por no decir ¿bruto, verdad?).
Bueno.Yo no soy un entendido en las actividades bosteras, pero sí en analizar, ver y comparar cifras, comportamientos y resultados y eso es lo que hice.
En primer lugar elaboré un gráfico donde puede verse la evolución de la población argentina desde 1869 y las existencias bovinas desde 1875, ambas hasta la fecha.

Cliquear sobre los gráficos para verlos mas grandes

Para hacerlo utilizé los censos nacionales para la población, pero para el vacaje debí recurrir a mas de una fuente por variar las mismas según el período o en todo caso por no haberlas encontrado yo.
Adjunto un cuadro con los valores e indicación de las fuentes.

Puede verse con toda claridad lo siguiente:
a) El crecimiento del stock ganadero bovino, que acompañaba mas o menos el de la población desde el último cuarto del siglo XIX, SE DETUVO EN EL AÑO 1977.
b) En los últimos 30 años se observa en cambio una tendencia firme y continuada a la disminución de la existencia de bovinos. Esto es reflejado claramente por el gráfico y explicitado por las rectas rojas de tendencia estadística del mismo gráfico.
c)De haberse mantenido la tendencia manifestada desde 1870 hasta 1977 el stock actual debería rondar los 70 millones de vacunos en vez de los 49 millones existentes.
Así que podemos extraer como primer conclusión que el deterioro del stock ganadero viene de larga data y solo idiotas, malvados, o idiotas malvados, pueden acreditar el fenómeno a las medidas de Néstor y Cristina.
En realidad si observan la última década notarán que sorprendentemente se produce un pronunciado incremento de la población bovina a partir del 2004 y la misma se mantiene hasta 2009 por encima de los registros anteriores a ese período.
Pero no se alegren. Los malditos K no son responsables del deterioro (que como vimos comenzo a fines de la decada del 70) pero tampoco de ese aparente logro.
Porque como veremos proximamente ¡No sabemos cuantas vacas hay, o por lo menos, lo sabemos con un error probable de la putamadre!

Aguantenme un cachito que ya vuelvo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

muy interesante el post y muy bueno el laburo de los graficos!


saludos compañero!



Keysersose7777

68 y contando (y van 75) dijo...

Keiser: Gracias, me alegra que sea útil, la continuación está en hervor.Saludos