miércoles, 23 de septiembre de 2015

Hablando al pe….tróleo (III)

(III) ¿Qué se saca cuando se saca petróleo?
Lógicamente los lectores estarán interesados en ver intentos de análisis de porqué el precio sube y de porqué el precio baja y de cuánto cuesta sacar cada litro del negro producto. Bueno; algún día lo intentaré espero, pero por ahora sólo iremos incursionando en cosas que creo que es interesante conocer de puro curiosos que somos nomás, como el tema que elegí para hoy.
Es usual ver escenas donde las torres de perforación petroleras pinchan el manto petrolífero y sale disparada una columna de negro y puro petróleo, con lo que basta colocar una válvula y el petróleo irá saliendo y viajando solito a donde uno disponga. Bueno; lamento comunicarles que eso dura poco cuando sucede y en muchos casos ni siquiera sucede.
Sucede tan poco que a Diciembre de 2014 solamente 1 de cada 10 pozos en extracción en nuestro país lo hacía en forma natural. Las excelentes estadísticas de la Secretaría de Energía detallan 8 formas diferentes en uso para lograr la extracción del petróleo cuando no sucede en forma natural. El 64 % de la extracción total se efectúa mediante bombeo mecánico (las muy conocidas “Cigüeñas", como las que decoran esta entrada), pero también se lo hace inyectando agua, o gas, o mediante bombas sumergidas en el pozo (o sea la perforación) u otras técnicas de varias de las cuales… (hablémos bajito; no tengo la más puta idea como operan).
En el cuadro siguiente pueden ver los detalles

Ya saben, cliqueando sobre el grabado podrán verlo bien
Pero veamos ahora lo más sorprendente y que dio título a esta entrada: ¿Qué se saca cuando se saca petróleo? Y la respuesta es: ¡Agua, por supuesto! ¿Quién no lo sabe? Ah, me olvidaba, también un poco de petróleo.
En el año 2014 el total de lo extraído de todos los pozos en el país estuvo constituido así : 92,5 % fue Agua y 7,5 % Petróleo o -si lo vemos de otra manera-por cada metro cúbico de Petróleo se extrajeron 12 metros cúbicos de Agua.
¡A la pipeta! (dirá alguno) ¿De dónde vino esa agua? Bueno intentaremos explicarlo lo mejor posible: imaginemos que la corteza terrestre es en muchas partes algo parecido a un apilado de Piononos, unos más porosos, otros menos y en algún punto entre un Pionono y otro hay una capa de Azúcar laqueada.
Por razones que creemos conocer pero no muy seguro (como comentamos en la entrada anterior) el petróleo se formó, el gas se formó y junto con mucha agua (salina siempre según parece, como si fuera de mar, lo que reforzaría la creencia de que se originaron por descomposición de animalillos de antiguos mares aunque no es lo que yo creo), junto con el agua decimos, quedaron entrampados en el pionono bajo el azúcar laqueada que no los deja ascender.
Imaginen entonces que el petróleo y el agua cuando se hace una perforación hasta ese pionono circulan entre los granos, por intersticios minúsculos y van hacia el agujero, ya sea presionados por el gas o porque una bomba va retirando el agua petrolosa y fluyen hacia donde hay menos presión.
El petróleo es siempre más liviano que el agua –aunque hay tipos más y menos pesados de petróleo, ya lo veremos- y dentro del pionono estará en los poros de más arriba. Los petroleros intentan con artificios técnicos que solo fluya petróleo pero siempre sale algo de la puta agua y a medida que se extrae peor, pues el nivel del petróleo baja y aparte tiene que fluir desde más lejos hasta el pozo. Como es más viscoso que el agua todo conduce a que cada vez fluya menos (es lo que se denomina “campos maduros”, para no decirles viejos que queda feo).
Para facilitar la comprensión aquí van unos esquemas que lógicamente afané de Google.

Por supuesto el agua debe separarse del Petróleo, lo que se hace en estaciones ad hoc adonde llega por cañerías el producto de varios pozos. El petróleo queda con un pequeño contenido (menor al 2 %) que será separado en las Refinerías.
El agua separada contiene a su vez pequeños porcentajes de petróleo y se la reinyecta en el pionono generalmente en un pozo ubicado entre 3 ó 4 pozos circundantes en labores de extracción. Se la denomina “agua inyectada”.
Alguno aplaudirá esa acción como un modelo de cuidado del medioambiente. Bueno, no. Sucede que de esa manera se mantiene constante lo que sería el nivel de petróleo y agua pese a la extracción, nivel que es el que ordena el flujo hacia la perforación.
Llega un momento en el que debe agregarse agua de otro origen para compensar el volumen perdido de petróleo y agua. Esto se denomina “recuperación secundaria”. Esa agua proviene de ríos (o del mar preferentemente por su salinidad que la vuelve más densa) y mejora el “flotado” y empuje del petróleo en el Pionono.
En nuestro país la recuperación secundaria se aumentó en 2014 como parte de la operatoria para mejorar la producción corrigiendo la “madurez” de los campos, pasándose de producir 12,8 millones de m3 en 2012 (último año del gallegaje) a 16,4 millones de m3, el 55 % del total producido de petróleo.
Y basta por hoy. La próxima entrada, como si fuera en honor a Carlitos Balá se denominará (IV)¿Qué gusto tiene el petróleo?

Eeeeeapepe!


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